- La pareja se separa por 0,4 segundos cuando Sébastien Ogier sufre un revés temprano en Sudamérica.
Ott Tänak ha preparado el escenario para un posible tercer triunfo consecutivo en el Rally Chile Bio Bío, terminando la primera etapa del viernes con una estrecha ventaja de 0,4 segundos.
Fue un día de suerte dispar para el estonio, que ha ganado todas las pruebas del WRC celebradas anteriormente en Chile. Tänak tuvo problemas por la mañana y a la hora del almuerzo ocupaba la quinta posición tras lidiar con la falta de confianza y equilibrio en su Hyundai i20 Rally1 HYBRID durante la primera pasada por las tres especiales de tierra al sur de Concepción. Sin embargo, los ajustes de configuración en la asistencia rejuvenecieron su rendimiento y le ayudaron a superar a su rival de Toyota, Elfyn Evans, en la penúltima especial de Rere para hacerse con el liderato de la noche.
A pesar de la buena actuación de Tänak por la tarde, Sébastien Ogier fue el más potente durante la primera jornada. El francés ganó tres tramos y habría liderado el rally con casi 30 segundos de ventaja si no se hubiera salido y golpeado un talud en la ES3, lo que le obligó a parar y cambiar una rueda.
Sin embargo, Tänak sigue preparado para cerrar la brecha de puntos con su compañero de equipo líder del campeonato, Thierry Neuville, quien terminó en sexto lugar.
Evans, que ha tenido un comienzo lento en los últimos eventos, tuvo un comienzo más agresivo en Chile, pero tuvo problemas de confianza en la vuelta de la tarde, admitiendo:
“La verdad es que estoy un poco perdido con la sensación. No me siento natural en este momento”.
El dos veces campeón del mundo Kalle Rovanperä completó los tres primeros puestos, a 6,7 segundos de Evans con su GR Yaris Rally1 HYBRID, aunque él también expresó su frustración tras sobrepasar la curva y golpear una puerta en el tramo SS4.
“No me siento cómodo en estas carreteras”, explicó Rovanperä. “Cuando está seco, no se adapta a mi estilo de conducción habitual. Lucho mucho con el coche y con mi forma de conducir”.
En la prueba en la que debutó en la máxima categoría el año pasado, Grégoire Munster realizó su mejor actuación de la temporada, pero los daños en los neumáticos en la última especial le hicieron caer al quinto puesto, por detrás del debutante de Toyota, Sami Pajari. Al final del día, ambos estaban separados por solo 1,4 segundos, y Pajari estaba a solo 2,2 segundos de Rovanperä.
Para los compañeros de equipo de Munster en el M-Sport Ford Puma Rally1, el día fue más complicado. Mārtiņš Sesks abandonó su coche no híbrido por la mañana después de chocar contra un talud y dañar dos neumáticos cuando solo llevaba una rueda de repuesto. Adrien Fourmaux cayó del cuarto al octavo lugar después de incurrir en una penalización de un minuto por llegar tarde al tramo 5. El retraso se debió a reparaciones en la carretera, primero en su alternador y luego en una tubería de agua.
El líder del campeonato, Neuville, terminó el día en sexto lugar, a más de medio minuto del líder. Al abrir pista, tuvo problemas con el terreno suelto, pero aun así aventajó a su compañero de equipo Esapekka Lappi por 5,8 segundos.
«No había mucho más que pudiera hacer», admitió Neuville, mientras que Lappi describió su actuación como «un día desastroso».
Fourmaux llevó su Puma al octavo lugar, justo por delante de Ogier, mientras que el líder del WRC2, Nikolay Gryazin, completó el top 10.
El sábado será una auténtica prueba de resistencia y gestión de neumáticos, con seis etapas que suman un total de casi 140 kilómetros de recorrido.
Clasificación del viernes:
- 1.- O Tänak / M Järveoja EST Hyundai i20 N 58m 6,9s
- 2.- E Evans / S Martin GBR Toyota GR Yaris +0,4s
- 3.- K Rovanperä / J Halttunen FIN Toyota GR Yaris +7,1s
- 4.- S Pajari / E Mälkönen FIN Toyota GR Yaris +9,3s
- 5.- G Munster / L Louka LUX Ford Puma +10.7s
- 6.- T Neuville / M Wydaeghe BEL Hyundai i20 N +30.3s
Información: WRC Media Service
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