Uno de los dilemas que suelen pasar por nuestra mente cuando vamos a comprar un auto es qué tipo de trasmisión es la mejor para cubrir nuestras necesidades: automática o estándar. La necesidad de hacer una buena elección incrementa cuando tenemos en cuenta que un auto no se compra todos los días y que el simple hecho de cambiar el auto nos costará dinero. A continuación te mostraremos ventajas de cada una de estos sistemas, que por consiguiente serán desventajas para el otra, esperando que esto te ayude a tomar la mejor decisión o la que más se acerque a tus necesidades.

Confort

Automático. Cómodo y práctico para conducir, ya que te permite tener una mano desocupada en algunos momentos durante la conducción.

Automático. No tienes que llevar en mente la marcha que llevas ni la próxima que meterás, mucho menos en qué momento es necesario cambiarla.

Automático. Los autos con este sistema son manejables para todo tipo de personas (gente mayor o con la falta de alguna extremidad).

Automático. Es menos cansado manejar este tipo de autos y más si lo haces durante muchas horas.

Economía

Estándar. El auto es más barato (de 10 a 15 mil pesos) tan sólo por llevar este tipo de trasmisión.

Estándar. Las reparaciones, refacciones y mantenimiento son más baratas en comparación al automático.

Estándar. El mantenimiento para esta trasmisión es más prolongado; debido a que no lleva una velocidad puesta todo el tiempo provoca menos desgaste.

Estándar. Por esta misma razón la caja de velocidades ahorra combustible, ya que no tiene que estar deteniendo continuamente el impulso del auto por ir hacia adelante aun cuando el auto esté parado.

Estándar. Como este tipo de trasmisión no tiene este impulso que detener, el sistema de frenos es más durable (balatas, discos, frenos, líquido de frenos y bomba de frenos).

Desempeño

Automático. Evitas al 100% el deslizamiento en una subida al momento de iniciar marcha.

Estándar. Estos autos son más rápidos, ya que la velocidad tú la diriges y puedes decidir a qué revoluciones haces el siguiente cambio.

Estándar. Te permite tener más dominio del auto en cuanto a velocidad, tracción y maniobrabilidad.

Estándar. Te ofrece una sensación de manejo más deportivo; de hecho todos los autos superdeportivos son estándar.

Seguridad

Automático. Elimina casi por completo el riesgo de que se apague el vehículo por accidente al iniciar marcha y mientras circulas.

Estándar. Si sufres alguna descompostura se puede empujar e incluso es más fácil echarlo a andar el vehículo.

Estándar. Debido a que es más rápido, es más seguro rebasar en carretera.

Estándar. Por este mismo motivo las pendientes prolongadas no serán problema.

Estándar. Te mantiene más alerta en tramos largos de manejo.

En mi opinión, los autos automáticos son ideales para los siguientes conductores:

  • Personas a quienes su condición física no les permite manejar estándar.
  • Personas que generalmente no manejan rápido ni contra reloj.
  • Personas a las que no se les ve afectada de manera considerable su economía.
  • Personas que llevan niños que deben ser vigilados constantemente.